Entradas

Mostrando entradas de abril, 2012
No es que no quiera estudiar física. No, no es eso. El problema está en el hecho de tener que estudiar lanzamientos, fórmulas, despejes, velocidades reales, desplazamientos, tiempos absurdos, de vuelo, de nada, cuando solo me importa cerrar los ojos y calcular la longitud de tu sonrisa, la velocidad de tu voz, de tus tiempos, tus miradas. De todo lo que tú, pequeño absurdo, significas en mi vida. Bah, necesito una dosis de realidad.
¿Ésto de tropezarse con la misma piedra tendrá un límite o es un número indeterminado?

Alto nivel de sentimentalismo. Por favor, abstenerse.

Ese instante perfecto en el cual puedes demostrar que tú, ese pequeño desastre, también puedes subirte a un escenario, poner lo mejor de ti y llegar lejos. Muy lejos. Bueno, nada, éstas son unas simples líneas de agradecimiento a esas personas que hoy estuvieron a mi lado, apoyándome, sonriéndome, tomando mi mano, haciéndome sentir un poco más viva...Si, aunque suene exagerado. Gracias, amigas, porque sin ustedes, jamás habría comprendido el verdadero significado de éste concurso, que mucho más allá de demostrar la belleza física que podamos poseer, nos abre los ojos del entendimiento, del alma, de nuestro espíritu. Aparte de todo ésto, quiero agradecer a una persona que estuvo mirándome todo el tiempo, sonriendo divertido, quizás hasta con cierta pena y una gran emoción. Caminó conmigo, tomó mi mano y me empujó aún y cuando me comían los nervios. Gracias, papá. A mi mamá, por soportar mis rabietas nerviosas, mis quejas y a mi, como desastre. No importa. Por cierto, mamá,  a ti que

Adverbio de duda.

Quizás algún día acepte toda ésta locura social, llena de parámetros, mediocridad y falta de principios. Quizás deje de pensar que las cosas eternas duran un segundo nada más. Quizás, deje de utilizar tanto éste adverbio. Quizás, solo quizás.
Cada vez que escucho hablando a alguien sobre "Tres metros sobre el cielo", callo y presto atención a sus palabras, las saboreo, las digiero y luego me queda un amargo sabor. ¿Por qué cuesta tanto entender que no es otra simple historia de amor? Quizás soy una desalmada que simplemente piensa que un final feliz es fácil de escribir, de exponer, de llevarlo al mundo y decirle "vive, dura. Ustedes pueden". Aunque, puede que simplemente sea realista. "I o E te tre metri sopra il cielo", así reza el título de éste libro qué, a pesar de tener tanta fama en su adaptación al cine español, no muchas personas lo conocen.  Y si, tiene su versión en el cine italiano, también.  Como decía, éste libro de Federico Moccia, llegó a mis manos gracias a un torrent (Bendita tecnología) y quemé mis retinas leyéndolo, una, dos, tres, siete horas. Un día, otro, listo. Acabado. Me encantó, por lo realista, por lo vivido, por la narración tan detallista de cada escena, cada resp
Imagen
Comienzas a tener fe en la humanidad, cuando sabes que allí, afuera, en cualquier parte de esta vastedad que llamamos mundo, alguien está leyendo a Cortázar. "Siempre fuiste un espejo terrible, una espantosa máquina de repeticiones, y lo que llamamos amarnos fue quizá que yo estaba de pie delante de ti.." Cortázar, jamás dejarás de moverme el piso, la existencia, la conciencia y las ganas de leer hasta que consiga escribir una milésima parte de lo que una frase tuya ha sido y será.
"El amor es sufrido, es benigno;el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor;no se goza de la injusticia, más se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta" 1era carta del apóstol San Pablo a los corintios, específicamente el capítulo 13. Así, estaba buscándole un significado al amor como valor moral, motivo de existencia, no como una palabra alejada de su propósito firme y original. Luego, me encontré con ese pasaje bíblico, que mucho más que abrirme los ojos, me dio mil y un respuestas en tan solo cinco líneas perfectamente plasmadas. Nadie jamás sabrá amar, hasta no poder comprender que el mundo necesita de ese sentimiento que todos dicen conocer hasta un punto desquiciado, absurdo, mentiroso, falso, sin argumentos. Pero allí, se resume el origen, la historia y el destino de ese camino de vida que todos deberíamos aprender a tomar.
Hace un año, comencé a escribir en éste recuadro por la simple razón de querer hablar con alguien. Mejor dicho, quería hablar conmigo, quería aprender a hacerlo. Pasó un año y poco más de un mes. Sigo aquí, sin entender como se supone que me entienda.

Caracas, 1 de marzo de 2012. Retraída.

"Estoy aquí, en psicología, observando todo y callando una vez más. Sintiéndome absurda (¿Cuantas veces repito lo mismo?). Entre factores perceptivos y poemas de Rubén Darío ha pasado la mañana. Me sigo sintiendo absurda, incoherente, desesperada. Como siempre. Como si de pertenecer se tratara, lo intenté, pero claramente no funcionó. Y es que, claro, no puedes intentar unirte a algo que ya funciona perfectamente, sin ti. Sin ti, sin tus ganas de quedarte atada a la cama, sin pensar, sin sentir dolor ni piedad, solo remordimiento. Remordimiento por haberte perdido, por seguir sin ti, sin tus ganas de vivir juntos, sin atarnos, sintiendo, pensando, con alegría, o lo que sea...Pero contigo. Fuiste una solución a mis sentidos. Mi llave maestra, el escapista perfecto. Bah, se acaba la hora, mientras intento calmar mis impulsos escribiendo aquí, como si no importara nada lo que me rodea. Pero no. Me importa y mucho. Más de lo que debería, hasta llegar al punto de lastimarme, h