Entradas

Mostrando entradas de octubre, 2012

Il prend ma main et jamais ne me permets d'aller.

Un día, por azares del destino, nos topamos en una feria. Un intercambio gradual de abrazos, entre desconocidos. Contadas palabras entre risas, un mundo irreal y fantasioso de superhéroes, ángeles  demonios y un poco más de la ciencia ficción. Me caíste bien y quiero creer que para ti, el sentimiento fue el mismo. ¿Recuerdas aquella noche, contando historias, anécdotas, salidas? De parte en parte, entregando recuerdos para compartirlos y caminar de la mano. No se como explicarte esto sin caer en retóricas, pero tus ojos tienen ese brillo que se consigue solo en ciertos momentos específicos de la vida. Cuando cae el sol y el viento baja, la oscuridad se abre paso y allí estás tú, con tus grandes ojos verdes, detrás de un libro, indagando sobre tantas historias fascinantes que consiguen dejarte atadas a ellas, colgando de un hilo, lejos del mundo real, de todo problema, sin perturbaciones. Admito mi incapacidad de querer con restricciones y tú, como buena confidente, lo sabes muy

Jaula de cristal.

¿Por qué armar una casa artificial para un ave que solo quiere ser libre? Cientos de lugares para visitar, si lo deseaba. ¿Por qué obligarlo a doblegarse ante un destino cruel, privándolo de lo único que importa? Su amor propio, sus alas sin cortes, sin justificaciones para sus deseos, aspiraciones. Aquella ave, termina siendo una deformación de su concepto, un cambio en su definición. Olvida volar, sentir el viento en sus alas; altas cumbres, pequeñas cornisas. Se transformó en un ser coartado, cohibido, triste y esclavo de un destino que no merece. Egoísmo y caprichos injustificados, que otros quieren tildar de "amor". Un amor enfermo e imposible, puesto que amar implica libertad entre tú y aquél ave que quiere emanciparse, lleno de osadía y ganas de descubrir; No un camino lleno de baches, errores tapados con promesas y una casa artificial, donde le mantienes cautivo, en una condena unilateral y sin derecho a respirar, una vez más, el aíre bajo su propio albedrío.

anima, vita e tutto ciò.

Comprendes el vacío cuando lo tocas con cada nervio de tu cuerpo, con cada fibra de tu mente; cuando de sentimientos se va tratando. Si tan solo entendieras qué, detrás de cada pensamiento, hay una neurona trabajando, para darle vida. Más allá de ti, el mundo es una caja inmensa que aspiras conocer, respirar, palpar, vivir; una vía para el cáos o la bondad, la felicidad o mera desdicha, un paso o el estanque. La vida y la muerte, espectadoras silentes de una lucha de ideales entre tú; el que eres y el que fuiste, el que serás; el qué, en el pasado, decidió sentir más que un simple respiro, una simple existencia. Tú, queriendo más de un universo que no entiendes, que no razonas, y sin embargo, sigues atado a él, para conseguir respuestas qué, probablemente, nunca encuentres. Entonces, te dispones a observar una vez más, abriendo despacio tus ojos, cual puerta de tu alma, en silencio, sin victorias, y te encuentras con la realidad. No hay nada, solo una ausencia de ti.

Acuerdo.

Sonreíste, porque me viste suspirar por lo bajo, mientras disimulaba el hecho de estar mirándote de reojo, como de pequeños. Me has visto escribir, desde siempre, cuando era menos complicado conjugar verbos afectivos y nombrar aquellas cosquillas que me hiciste sentir, en aquél momento. Estoy dispuesta a conquistarte de a poquito, por lo bajo, con caricias momentáneas qué, quizás, ni siquiera sientas, porque jamás me atrevería a que esto se escapara de simples letras. No, nunca. Te beso, cada vez que te escribo. Y, como si de la inexistencia del resto del mundo se tratara, te lo digo aquí, sin pena. Fabricaré, de ser necesario, una noche bajo las estrellas, solo para ti. Una cama de sonrisas, donde convertir tu piel en una almohada, tus besos en una sábana y nuestras ganas, para vivir. Después de tanto, al despertar, se que seguirás soñando con un mundo nuevo de sonrisas, donde caminemos bajo el mismo cielo,   compartiendo metas, de vez en cuando. Quiero pedirte disculpas, desde

18.262 días y otras tantas miles de noches.

Un vaso de whisky acabado por la histeria, el calor, la falta de hielo. Unas manos agrietadas por el tiempo, las malas jugadas, los viejos recuerdos. Tantas veces recorrieron aquel mismo cuerpo, para memorizarlo cual cartógrafo, dueño de cada rincón inhóspito y exuberante de su anatomía. Ahora, esas manos exploradoras, solo viven de añoranzas. Sus dedos, cargados de pequeñas y finas arrugas siguen imaginando aquel firmamento; aquella firmeza qué, solo ella, podía poseer.  Hasta el tiempo mismo está cansado de pasar.  Mucho antes de saberla suya, la idealizó. La hizo parte de un circo de beldades, de un mundo maravilloso. Miles de motivos para amarla y otros tantos para darle vuelo a la imaginación y a los momentos, vividos y por vivir, sin tan siquiera declararle todo lo que pasaba por su mente ¿Y por qué no? También su corazón.  No se como continuar, porque lo más extraño y complicado del amor es colocarle parámetros, cargarlo de definiciones, adjudicarle un sentido.  No

Para un país que no descansa, ni aunque el tiempo venga en contra.

Hoy, la Venezuela que conozco, está llorando. Te hablo a ti, que despierta todos los días en plena madrugada, para trabajar y estudiar, luchando por algo más que el conformismo. A ti, que sabes lo que significa vivir de un sueldo mínimo con niveles de inflación que rayan en lo absurdo. A ti, que estás cansado de vivir en una burbuja de odio, mediocridad y una fachada de inclusión. Antes que nada, me hago totalmente responsable de mis palabras, mis pensamientos. Por otro lado, hay una Venezuela que vive en una realidad alterna. ¿Como es posible ignorar el proceso de decadencia en el que nos sumimos? Es una realidad latente ¿Como no pueden verlo? Yo hablo por todas esas madres de la patria que tienen que ver morir a sus hijos, esposos, sobrinos, ahijados, a causa de una delincuencia imparable, en cada barrio de nuestro país. ¿Que hay del hombre, aquel padre de familia que lucha por darle un futuro a sus hijos y ni siquiera puede llegar a fin de mes? El socialismo se define como
Ayer, llegué a este rincón de mis recuerdos. Aún sigo intentando encontrar una justificación para mis actos, mi partida; pero solo hay una razón y es mi incapacidad para seguir viviendo de migajas de sonrisas, mentiras justificadas para el bienestar de un 3ero y la ausencia de intuición o sentido común, para alejarme de tanta muerte hacia mi misma, estando a tu lado. Me dispuse a darle un alto a la fatiga que me causa la sumisión de un pasado impuesto, por capricho de un destino febril y esperanzado en un "tu y yo"; y es que en este caso la etimología del amor se equivocó, pues ya no somos solo dos en este enredo, aunque no estoy segura si algún día realmente lo fuimos o fue una simple suposición que adopté, para evitarme tantos lamentos qué, hoy en día, me acompañan. Son ellos, están aquí, susurrando a través del eco callado, todas esas palabras que no dijimos, para salvarnos de una despedida definitiva capaz de destrozarnos más, mucho más, de lo que fueron capaces las ment